A menudo las empresas suelen pensar en el mundo Social Media como una fuente de captación de clientes. El error nace del clásico argumento de:
“Si todo el mundo está en las redes sociales, es allí donde debemos ir a buscarles”
El mundo del Social Media es uno de los que más ha evolucionado en los últimos 5 años dentro del Marketing Online. Inicialmente destacaban aquellos que mayor información aportaban, que más retweets hacían, que más enlaces compartían… hoy en día esta técnica no sirve absolutamente para nada si lo que se busca es generar ventas o una conversión concreta.
Así que pensar en las redes sociales o la estrategia de Social Media como una vía de captación de nuevos clientes para la empresa seguramente sea una de las inversiones menos productivas y con un ROI más bajo de todas las campañas de Marketing Online de la empresa.
Y es que en su día fue una buena vía de notoriedad y atracción, pero en los tiempos que corren todas las empresas están presentes (de mejor o peor forma) en las redes sociales, y la mayoría pasan por fases de imitación donde difunden contenido repetido constantemente sin caer en la cuenta que eso no es lo que buscan sus clientes potenciales.
“Estar en las redes sociales no significa estar bien y tener una estrategia adecuada, para ello se debería pensar en este canal como un método de fidelización, aprendizaje, comunicación y feedback con el cliente”
El valor de las redes sociales recae en la inmediatez y la proximidad. Es el momento de eliminar barreras con el cliente y mostrar el verdadero servicio de asesoramiento o atención al cliente que todas las empresas buscan. La herramienta no requiere grandes inversiones, abrirse una cuenta en las redes sociales es gratuito, así que únicamente se necesita una estrategia de comunicación en redes sociales adecuada y personal dispuesto a alinearse con los valores de la marca y convertirse en el soporte que todo usuario de la marca necesite.
Necesitamos, en primer lugar, conocer el algoritmo de la red social que vamos a trabajar; cómo se comporta, cómo recomienda el contenido... Por otro lado, necesitamos crear contenido de valor que resuene con nuestra audiencia.
Y hablando de calidad en el contenido, aquí radica la otra gran cualidad de una buena estrategia de Social Media, y es su correcta interrelación con la generación y redacción de contenidos útiles para los clientes reales y potenciales. Hablamos de contenidos de todo tipo: infografías, artículos, vídeos, webinars… cualquier formato es bueno y adecuado si es el formato en el que a tus clientes o clientes potenciales les gustaría encontrar la información.
“No pensemos en qué formato de publicación se adapta mejor a lo que tenemos que decir sino qué formato es el más adecuado para aquello que los clientes realmente necesitan”
Por todo ello, crear, mantener y dotar un blog de información útil para la comunidad es un pilar fundamental en la mayoría de estrategias de Marketing Online, que tendrá en la difusión, conversación y viralización en Redes Sociales su principal baza.
En resumen, captar una venta o conversión de un cliente nuevo es mucho más costoso en tiempo y dinero que conseguir una venta de un cliente recurrente, y será a través de la fidelización que se potencie esta alternativa de conversión. Para ello, las redes sociales son una forma excelente de contactar y descubrir las verdaderas necesidades de nuestros antiguos clientes, y con ello promover nuevas campañas que respondan a ellas de forma efectiva. No olvides tampoco medir y analizar cada acción en Social Media de forma individualizada para descubrir qué redes sociales tienen una mayor tasa de conversión o qué contenidos u horas son los más efectivos para conseguir ventas.
Las redes sociales pueden ahorrarte mucho dinero, y aumentar con ello el ROI de tu empresa o la productividad de tus empleados si sabes cómo ajustar e implementar una estrategia de Social Media adecuada.