Durante la pasada semana, en Barcelona se ha celebrado el Mobile World Congress 2013. Este congreso, el más importante a nivel mundial sobre telefonía y tecnología móvil, atrae a profesionales de todo el mundo y expertos en este sector para contarnos las últimas novedades y el futuro que nos espera a nosotros y a nuestros dispositivos móviles.
Los smartphones llegaron hace años para quedarse y cada vez es más frecuente su uso en nuestro día a día para realizar todo tipo de acciones, disfrutar de aplicaciones, estar en contacto con nuestro entorno y para navegar por Internet. Con las tablets pasa lo mismo.
Los datos sorprenden y es que la navegación desde dispositivos móviles se ha incrementado más de un 85% durante el 2012 y se calcula que en el 2014 ya habrá más gente navegando en internet a través de dispositivos móviles que desde los ordenadores.
Entonces… ¿Debería una empresa invertir para tener una página web móvil? SIN DUDA. Ya debería haberlo hecho. Una web no responsive puede resultar en una pérdida significativa de usuarios móviles, quienes representan una gran parte del tráfico actual de internet.
El móvil será el instrumento que utilizaremos para consumir Internet mayoritariamente, y por lo tanto tenemos que adaptar las páginas web a las nuevas ventanas tecnológicas ya que una pantalla de PC de 27 pulgadas no es igual que la que tiene el Samsung Galaxy SIII o el iPad mini.
¿De dónde venimos? Las versiones móviles.
La pantalla de un dispositivo móvil está mucho más limitada que la de un PC y por lo tanto el contenido debe adaptarse en función del tamaño de la pantalla desde la que se visualiza. Mejorar la usabilidad diseño web es crucial para garantizar que los usuarios tengan una experiencia de navegación fluida y agradable independientemente del dispositivo que utilicen.
Es importante entonces que todo nuestro contenido en Internet sea capaz de cambiar su distribución en función de la pantalla o tener un aspecto totalmente diferente al que tienen las páginas tradicionales, todo con el fin de hacer la navegación y lectura del usuario mucho más sencilla y fluida.
Hasta ahora, los programadores y diseñadores web han ido recurriendo a redirecciones que llevaban a los usuarios que llegaban desde un dispositivo móvil de la web original para ordenadores (www.miempresa.com) a otra página web diferente, un subdominio del sitio, la versión móvil (m.miempresa.com).
Las versiones móviles suelen ser páginas muy ligeras ya que se tienen que adecuar a las capacidades de conexión de los terminales. Es decir, contienen información muy básica y de ningún modo podemos encontrar todo lo que se puede ver en una web para PC. Las versiones móviles son páginas demasiado limitadas y además presentan otro inconveniente importante.
Mantener actualizadas las dos versiones (web y web móvil) implica dos procesos distintos y el doble de trabajo. De este modo, cuando queríamos añadir una noticia, había que hacerlo en los dos sitios web., sino una página quedaba desactualizada, y no había forma de hacer que lo que publicásemos en una se publicase también en la otra.
Además, la versión móvil intenta tener el mismo contenido que la web original y el mismo contenido en dos sitios se llama contenido duplicado…
Esta solución de las versiones móviles de la página web fue bonita mientras duró, pero como todo en esta vida (y más en la tecnología) ha evolucionado a una nueva forma de crear páginas web para todo tipo de dispositivos.
Sí, es el momento del diseño adaptativo (Responsive Web Design).
Las versiones móviles siguen siendo la opción más utilizada por las empresas que quieren tener una página web móvil que mejore la navegación de los usuarios en las pequeñas pantallas. Pero esta tendencia va a cambiar.
De hecho, ese cambio ya ha empezado y cada vez son más las páginas web con diseño adaptativo/responsivo.
Este tipo de diseño consigue que el contenido de la página web se distribuya automáticamente en función de la pantalla desde la que se consulta. Esta es la característica principal, pero tiene otras ventajas:
- Sólo hay una única página. La URL del sitio no cambia, ni tampoco su contenido, sino que éste se adapta a la pantalla y todo se distribuye en función del espacio: texto, secciones, menús, imágenes, videos… Tener una sola URL nos ayudará en nuestra estrategia de posicionamiento en Internet y conseguiremos más visibilidad que teniendo dos versiones de la misma página. Además la inversión que hagamos en internet nos servirá para posicionar la página en los resultados de los buscadores tanto móviles como no móviles, y no tendremos que invertir el doble, una vez para cada versión.
- Menor coste de mantenimiento. El diseño web adaptativo incluye una sola página web, un solo diseño y por lo tanto un solo mantenimiento. Lo que modifiquemos en una se modificará también cuando se consulte la web desde un smartphone o Tablet u otro dispositivo, así que nuestro trabajo se reduce a la mitad.
- No contenido duplicado. El contenido sólo se publica en una página y sólo cambia su distribución así que evitaremos el castigo del Panda y no seremos penalizados por Google, que verá como trabajamos para mejorar la usabilidad de la web y eso lo valora muy positivamente.
- Mejor usabilidad. Con el Responsive Design conseguimos que la experiencia de navegación para el usuario sea más completa y fluida, ya que podrá acceder a toda la información desde su dispositivo y además esa información se adaptará para que pueda leer todo el contenido de la página. Las nuevas estructuras de navegación también hacen que consultar por internet desde el móvil sea mucho más agradable y atractivo para el usuario, y sin duda cada vez accederemos más gracias a esta tendencia.
Gracias al Responsive Web Design, ahorraremos en el mantenimiento de nuestra página, conseguiremos mayor visibilidad en Internet y convertiremos nuestra página en un sitio más amigable y completo para visitar desde un dispositivo móvil.
Es necesario adaptar los sitios y dotarlos de un diseño móvil ya que como usuarios queremos acceder a páginas desde todos nuestros dispositivos, y queremos que sean atractivas y fácilmente legibles, sin tener que hacer zoom, o desplazarnos 5 veces hacia la derecha para ver todo el contenido.
El consumo de Internet desde el móvil se ha disparado y lo va a seguir haciendo a un ritmo insospechado. Así que las empresas que no tengan ahora, ya, la iniciativa de hacer su web adaptativa, más adelante se verán muy atrasadas respecto a sus competidores y lo tendrán más difícil. El diseño web adaptativo no es el futuro, ES EL PRESENTE.