“No me hagas pensar”. Así lo deja claro Steve Krug, reconocido experto en experiencia de usuario y usabilidad, en el título de su libro más conocido. Los usuarios son cada vez más impacientes y esperan encontrar la solución más rápida y eficaz a su problema.
Para ello, la usabilidad en desarrollo y diseño web es indispensable, y resulta de gran ayuda cuando queremos responder ante este nuevo contexto. Una web no responsive puede llevar a una disminución significativa en el tráfico y la satisfacción del usuario, afectando negativamente los resultados. Pero ¿cómo conseguir un diseño web eficaz en clave de usabilidad? ¿Cómo dispongo los elementos en mi web para cumplir con las KPIs planteadas? ¿Qué metodología de trabajo debería utilizar?
A continuación, os detallamos un listado de 5 consejos de diseño web y usabilidad a tener en cuenta para que tu site, además de ser atractivo para el usuario, aporte valor para conseguir una mejor experiencia de navegación.
5 principios para aplicar en usabilidad y diseño web
Jerarquía visual
La composición y retícula es la base del diseño de una página web. Una vez tenemos definido este esqueleto, entran en juego los elementos esenciales que ayudan a dar vida al propio estilo: color, tipografía, iconografía, etc.
Trabajar correctamente las proporciones y tamaños de cada uno de estos elementos nos servirá para definir una jerarquía visual que guie al usuario. Esto permitirá una experiencia de usuario que permita saber a este dónde se encuentra dentro de la página, qué es más o menos importante y, en definitiva, ver de un vistazo qué le podría resultar más interesante.
Consistencia
Crear unidad y solidez en un diseño puede ser todo un reto cuando disponemos de tantos elementos y efectos que incorporar.
A veces, el uso incorrecto de los elementos puede jugar en nuestra contra y, no perder únicamente una jerarquía visual sino perder consistencia y comprensión en el diseño global – un efecto secundario que afectaría directamente a la usabilidad de la web.
En este sentido, ser fiel a un sistema de diseño puede ser un gran recurso para ganar consistencia, jerarquía visual y reflejar la imagen de marca correctamente.
Uno de los sistemas de diseños cada vez más utilizados tanto en diseño de páginas web como de apps, es Atomic Design.
Replicando el sistema de elementos atómicos, Atomic Design nos invita a construir una jerarquía que va desde la unidad más mínima (un átomo) hasta el grupo más completo (la página web). Esto nos permite crear desde cero todo un sistema que poco a poco va completándose a medida que le añadimos y agrupamos nuevos elementos/átomos.
Pongamos un ejemplo de esta jerarquía:
- Átomos: un texto, un icono, un botón…
- Moléculas: un footer, una cabecera o incluso un post (formado por un grupo de átomos).
- Organismo: la home, la página de contacto (formado por un grupo de moléculas).
- Sistema: la página web o el producto digital que estamos diseñando (formado por un grupo de organismos).
Gracias al Atomic Design, entenderemos en todo momento los engranajes del diseño y cómo podemos ir construyendo e integrando nuevos elementos dentro del propio sistema, manteniendo el mismo estilo en todo momento.
No tengas miedo del espacio en blanco
En ocasiones, puede entrar el pánico al ver espacios donde no existe contenido, sino un fondo en color sólido o espacios en blanco entre bloques. Probablemente no ha sido al azar.
Sin duda, debe utilizarse de forma eficiente para poder plasmar el contenido de una página correctamente, y resulta una pausa visual para que el usuario pueda procesar toda la información que ha escaneado.
Los espacios también aportan mayor legibilidad al contenido y ayudan a resaltar los CTAs.
Diseño responsive
El concepto de mobile first lo deja claro: los dispositivos móviles ya no son una opción, sino una prioridad. Implementar un diseño adaptativo asegura que tu sitio web se vea y funcione perfectamente en cualquier dispositivo, mejorando así la experiencia del usuario.
No te limites a crear un diseño atractivo únicamente para escritorio. Piensa previamente en cómo los elementos van a disponerse en un móvil y a partir de ahí escala a formatos más amplios.
El objetivo es conseguir un diseño flexible y adaptable tanto a las necesidades del usuario como a los dispositivos donde se muestra. ¡Se acabó el tamaño fijo!
Y si la web carga en menos de 3 segundos ¡perfecto!
Prueba, testea, corrige y vuelve a probar
Las metodologías ágiles forman ya parte del proceso de creación de proyectos digitales en la mayoría de los equipos de diseño y desarrollo.
Cuando los proyectos requieren rapidez, flexibilidad y planificación, es necesario un plan. Esta metodología de trabajo consiste en: definir, diseñar, construir, testear, revisar y entregar; todo dentro de un ciclo de entrega constante.
Dividir las tareas de esta manera ayuda a generar productos (nunca finales, siempre a modo de pruebas) de mayor calidad y responder a las necesidades de los usuarios de forma más rápida que, al igual que la propia metodología, cambian de prioridades y necesidades a un ritmo vertiginoso.
En definitiva, la clave para aplicar correctamente y de forma eficaz (esto es: que el usuario entienda nuestra web y cómo recorrerla), la usabilidad en diseño web reside en un principio que resume a los 5 anteriores: estrategia. La estrategia de poder integrar todos los elementos que forman el diseño de una página de una forma coordinada y otorgándole sentido a cada elemento. ¿Preparado para guiar a tus lectores hacia tus objetivos?